Un Rajoy “encantado de declarar” pide ahora ser testigo por videoconferencia

El tribunal del caso Gürtel deberá decidir si acepta su solicitud

Ernesto Ekaizer
3 min
Un Rajoy “encantado de declarar” pide  ahora ser testigo por videoconferencia

MadridMariano Rajoy ha solicitado, a través de un escrito del abogado del Partido Popular, al tribunal del caso Gürtel que su declaración en calidad de testigo se realice por videoconferencia. El presidente del PP y presidente del Gobierno había declarado el pasado 20 de abril que acudirá “encantado” a declarar como testigo , “un acto de pura normalidad”, según enfatizó.

El letrado del partido en el juicio, el ex teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Jesús Santos, explica en un escrito dirigido ayer al tribunal lo que entendía Rajoy por “pura normalidad”.“Es una práctica extendida en el ámbito judicial penal la posibilidad de realizar actuaciones judiciales a través de videoconferencia, está contemplada en nuestro ordenamiento jurídico y es una práctica cada vez más extendida, siendo cada vez más habitual la declaración por videoconferencia de todos aquellos funcionarios o testigos que residen fuera del partido judicial donde se celebre el juicio”.

La petición del PP se apoya especialmente en el voto particular del presidente del tribunal, Ángel Hurtado, quien se opuso a la declaración testifical de Rajoy frente a la mayoría del tribunal de los magistrados Julio de Diego y José Ricardo de Prada. En su auto, el tribunal citaba a Rajoy y establecía su presencia en el tribunal (artículos 702 y 703 de la ley de Enjuiciamiento Criminal). Hurtado, en cambio, pedía al tribunal que cambiara su criterio para tomar declaración a Rajoy por videoconferencia.

El letrado Santos cita “el voto particular emitido por el presidente”, Hurtado, en el que sostiene la necesidad de que la declaración se realice por videoconferencia. Y señala que el auto donde se resuelve la declaración de Rajoy, de 19 de abril de 2017, “únicamente acuerda la declaración de un testigo en juicio oral, pero de su literalidad se desprende que dicho auto no ha resuelto la forma en la que dicha declaración deberá ser practicada”.

En realidad, el tribunal sostiene que debe ser una declaración presencial, además, se dirigió al presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, para que haga los preparativos con La Moncloa para fijar la fecha de la comparecencia, acorde con la agenda de trabajo de Rajoy. El escrito de la defensa del PP señala que “ante una potencial solicitud de declarar por videoconferencia, no cabe sino que el tribunal la acuerde siempre que se den los requisitos legales para ello”.

Haciendo caso omiso a la decisión del tribunal –presencia del testigo ante el tribunal-, el PP señala: “No habiendo resuelto el tribunal de oficio la forma en la que deberá declarar el testigo… el testigo podrá solicitar la forma en que se practique la declaración, sea a través del sistema de videoconferencia. La declaración por videoconferencia es el medio menos perturbador para el desempeño de las funciones del cargo de presidente de Gobierno”.

Señala que “la posición institucional del testigo [Rajoy] aconseja que su declaración se realice a través de videoconferencia, ya que no podemos olvidar la agenda del presidente del Gobierno... es un asunto de Estado que afecta a la totalidad de los ciudadanos…basta consultar la agenda en la pagina web del Palacio de la Moncloa para confirmar el perjuicio evidente que causaría el desempeño de dicho cargo público la paralización de su actividad para comparecer en persona ante ese tribunal. Lo anterior sin tener en cuenta todos los imprevistos y cuestiones de Estado que debe atender un presidente de Gobierno tanto dentro como fuera de nuestras fronteras”.

En otros términos, el presidente del PP, Mariano Rajoy, puede acudir a actos de su partido en toda España sin que esto le cause un “perjuicio evidente”, pero, en cambio, está imposibilitado de hacerlo ante “ese tribunal”. El tribunal, pues, tendrá que deliberar y adoptar una resolución.

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